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Málaga 1: Contreras; Rojas, Larraínzar,
Fernando Sanz, Valcarce, Ruano, Movilla, De los Santos, Rufete, Catanha
y Darío Silva (Luque, m.75).
Barcelona 2: Hesp; Pujol, Abelardo, Frank de Boer, Bogarde, Ronald
de Boer (Gabri, m.6), Figo, Guardiola (Xavi, m.68), Cocu, Rivaldo (Dani,
m.61) y Kluivert.
Goles:
1-0, m.36: Catanha.
1-1, m.80: Abelardo.
1-2, m.86: Kluivert, de penalti.
Arbitro: Arturo Daudén Ibáñez (Comité de Aragón). Mostró tarjeta
amarilla a los locales Valcarce, Ruano y Rufete, y a los barcelonistas
Kluivert, Pujol y Bogarde
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 El
Barcelona se aupó al liderato provisional de la Liga de Primera división
tras vencer al Málaga por 2-1, merced a un penalti anotado por Kluivert
cuando faltaban cuatro minutos para la conclusión del partido. El conjunto
barcelonista sufrió lo indecible en La Rosaleda. Su rival fue mejor durante
gran parte del choque, disfrutó de una ventaja mínima (1-0) hasta el minuto
80 y sólo la eficacia del Barcelona en dos acciones ofensivas desequilibraron
el encuentro. Darío Silva, en el minuto 36, dio un gran pase a Catanha
para que el renacido goleador del Málaga marcase el primer tanto del partido
al empujar suavemente el balón.
La ventaja dio tranquilidad a un mejor Málaga, mientras el Barcelona no
reaccionaba, además de perder por lesión desde el minuto 6 a Ronald de
Boer, tras una entrada por detrás de Larraínzar. Tras el descanso el Barcelona
cimentó el centro del campo al aprovechar que el Málaga, temeroso, se
dedicó más al contragolpe. El reloj corría sin movimiento en el marcador.
El partido se adentró en los diez minutos finales, que resultaron cruciales
y polémicos a la vez.
En el minuto 80 Figo sacó una falta al borde del área y Abelardo, sin
marcaje, cabeceó para empatar. Seis minutos después Gabri se adentró en
el área malaguista y Larrainzar, en el intento de defender, incurrió en
penalti, muy protestado y que crispó el ánimo del público. Patrick Kluivert
lo lanzó con eficacia y sentenció la contienda. El delantero holandés,
sin embargo, tuvo un instante para acercarse a la grada en plena celebración
de su gol y efectuar un corte de manga o "butifarra" que exacerbó al público.
La polémica acción de Kluivert desató una lluvia de botellas de plástico
sobre el terreno de juego. Una de ellas impactó en la cabeza de Figo de
forma espectacular, quien fue atendido en el césped pero que no le impidió
terminar el partido. |
