El piloto finlandés Mika Hakkinen, de la escudería McLaren Mercedes, es el nuevo líder del Mundial de pilotos de Fórmula 1 tras su contundente victoria de hoy en la duodécima prueba del Campeonato, disputada sobre el trazado de Hungaroring.
El vigente campeón del Mundo, con su tercera victoria de la temporada, consigue arrebatar el liderato a un Michael Schumacher que no fue capaz de poner fin a la mala racha de las últimas carreras.
La segunda posición fue para el piloto de Ferrari, que ahora se encuentra a dos puntos de Hakkinen, y la tercera para el compañero de éste, el escocés David Coulthard, que después de tres segundos puestos en el trazado magiar (1995, 98 y 99) no pudo cumplir su deseo de finalmente subirse a lo más alto del podio.
El británico es en la actualidad tercero en el Mundial, a seis puntos del finés, que de esta manera, después de que muchos le dieran por muerto durante la primera mitad de la temporada, parece retomar de nuevo las riendas de su equipo, un liderato cuestionado tras la magnífica temporada que estaba realizando su compañero de escudería.
Durante la semana, el patrón de los coches plateados, Ron Dennis, ya había advertido que su equipo quería el liderato de pilotos y constructores lo antes posible, así como que lo estaba viendo "más cerca que nunca".
No se equivocaba y su empeño en "volver aún más excitante el campeonato" ha tenido respuesta. McLaren lidera la tabla de constructores con 112 puntos, uno más que la escudería del "Cavallino Rampante".

La primera curva, decisiva
Si la posición en la parrilla se antojaba decisiva de cara al resultado de la carrera, la salida, con un Schumacher que se había quedado fuera en la primera curva de las dos anteriores pruebas (Austria y Alemania), había levantado mucha expectación.
En el día previo a la carrera, el canadiense Jacques Villeneuve aseguraba que no habría boicot contra el "Kaiser", tan aficionado a realizar maniobras que rozan lo ilegal en las salidas. Finalmente, Hakkinen consiguió ganarle la partida al piloto de la Scuderia, que a pesar de haber conseguido su quinta "pole" de la temporada, tuvo que ceder en la primera curva, levantando el pie, ante el finlandés, que había ganado perfectamente el interior.
Poco después llegaría el fatídico incidente que dejó al español Pedro Martínez de la Rosa sin ninguna opción en el trazado magiar, ya que Villeneuve chocó con él, obligándole a entrar en boxes, lo que le relegó a la última posición en un trazado en el que el día anterior, otro español, Fernando Alonso, conseguía su primer podio de la Fórmula 3000 tras una carrera espectacular del asturiano, tan sólo superado por el líder, el brasileño Bruno Junqueira.
En la carrera de hoy, se confirmaban así los temores del piloto de Arrows, que sabía que este Gran Premio iba a resultar difícil para su monoplaza. Finalmente, De la Rosa tuvo que conformarse con la decimosexta y última posición al tener que rodar con problemas mecánicos, problablemente provocados por el accidente con el canadiense; mientras que el otro piloto español en liza, Marc Gené, a los mandos del Minardi, finalizó justo por delante de él.

Poca historia en un trazado "ratonero"
A partir de ese momento, la carrera no tuvo demasiada historia en un trazado como el húngaro, un circuito que coinciden en calificar de "ratonero" todos los pilotos, muy lento y donde los adelantamientos son una misión imposible prácticamente. Hakkinen, Schumacher, Coulthard, Ralf Schumacher, Barrichello y Frentzen se lanzaban en cabeza de la prueba.
Al final, en cuanto a la posición de los favoritos tan sólo variaría la del piloto brasileño, que en la anterior prueba del Mundial, en Hockenheim (Alemania), había conseguido la primera victoria de su carrera deportiva en Fórmula 1, y que en el circuito de Budapest concluyó en cuarta posición. Sin duda, la lucha por el segundo peldaño del cajón entre el "Kaiser" y Coulthard fue lo más interesante de una prueba liderada de principio a fin por Hakkinen.
Finalmente, el piloto de Ferrari consiguió mantener a raya al escocés y sumar seis puntos que a estas alturas de campeonato son muy importantes, aunque no le permiten mantener el liderato provisional.