La ciclista estadounidense Mari Holden ganó el título de campeona del Mundo de contrarreloj en la localidad francesa de Plouay, al imponerse en la prueba a la francesa Jeannie Longo, que quedó en segunda posición. La ausencia de la holandesa Leontien van Moorsel, oro en los Juegos Olímpicos de Sidney, hizo que estas dos ciclistas fuesen las favoritas a alzarse con la victoria, como ha sucedido. De hecho el título tan sólo se decantó del lado de la americana por 3 segundos y 7 centésimas.
El tercer lugar fue para la lituana Rasa Polikeviciute quien se subió al podio junto a las corredoras francesa y norteamericana.