FERNANDO M. CARREÑO
En el mundo del tenis la fama suele conseguirse por hacer las cosas antes que nadie (de ahí las incontables listas sobre "el más joven que" o "la más joven que") pero tal circunstancia revela, a su pesar, y oculta a la vez, que tanto mérito como estos alardes de juventud tiene mantenerse en la brecha un año tras otro. Y quizá más ir siempre de menos a más, como es el caso de Francisco 'Pato' Clavet, que a sus 32 años y cuando está iniciando su decimosexta temporada profesional ha alcanzado su mejor posición de siempre en el ránking mundial: el 16 de la Carrera de Campeones tras su triunfo en Scottsdale, que supera el 18 que alcanzó el 18 de julio de 1992 (a los 23 años) tras alcanzar la final de Gstaad. Será un tópico, pero 'Pato' Clavet ha mejorado con los años como el buen vino, sin haber sido nunca malo.

'Pato', creado para el tenis gracias en buena parte al apoyo de Pedro Muñoz, creador del torneo del Espinar y ahora flamante presidente de la Federación de Tenis de Madrid, dio sus primeros pasos de la mano de 'Pato' Alvarez, junto a Emilio Sánchez Vicario. Luego, abandonó el grupo y comenzó a viajar y entrenar con su hermano mayor, 'Pepo', siempre realizando temporadas larguisimas en las que demostró, entre otras cosas, haber sido el mejor jugador español sobre pista rápida e 'indoor', junto a Bruguera, antes de los tiempos de Moyá y Corretja. 'Pato', siempre buen chico, siempre sin dar un ruido ni decir una palabra más alta que otra, a veces se quejó de ser el 'Patito feo' de nuestro tenis, cuyos resultados no se valoraban lo suficiente y que siempre se quedaba fuera de la Copa Davis, pero la perseverancia tiene siempre previo, y el suyo llegó con los años. En 1991 ya batió un récord al ganar el torneo de Hilversum como "lucky loser" (jugador repescado de la previa).

En 1998 se convirtió en el primer español en mucho tiempo en jugar los octavos de Wimbledon, derrotando al segundo favorito, el 'chino' Ríos. En 1999, al fin llegó su debut en Copa Davis y ahora ha ganado su primer título en rápida, y nada menos que ante un 'top' como Magnus Norman, porque en Clavet la perseverancia es una segunda naturaleza. En 1999, por ejemplo, ganó su primer Masters nacional tras cinco asaltos fallidos y debutó en Copa Davis. Y lo mejor de esto es que 'Pato' sigue tan fuerte e ilusionado como cuando era el 'Patito feo' de nuestro tenis. Y este mantenerse entre los 100 primeros durante más de una década, y ser el único seguidor del Atlético de Madrid en el ATP Tour, imprime carácter..