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 Tenía
que demostrar que lo del año pasado no fue casualidad y, no
sin esfuerzo, lo ha demostrado. Por segundo año consecutivo
subirá al podio junto a Lance Armstrong y Jan Ullrich. Beloki
ha demostrado que no es flor de un día y que es un corredor
completo, porque se defiende tan bien en la alta montaña como
contra el crono, cosa que no es habitual salvo en casos excepcionales
como el de Armstrong y Ullrich, un peldaño por encima de los
demás, aunque el alemán, ciertamente, no dejó ayer un buen
sabor de boca.
Su segundo podio consecutivo en el Tour significa que, de
cara a la Vuelta, Beloki es un serio aspirante al triunfo,
porque también ésta se decidirá en la montaña y en la contra
reloj y, para las etapas llanas y de viento, está rodeado
del mejor equipo. Curiosamente, lo mismo vale para Igor González
de Galdeano, aunque éste ya sabe lo que es estar delante en
la Vuelta, sólo que ahora también ha visto que puede luchar
por el podio del Tour.
Teniendo en cuenta que, tras Armstrong y Ullrich, los españoles
han sido los dominadores del Tour y que, probablemente, ni
el americano ni el alemán correrán la Vuelta, lo lógico es
que sean los protagonistas de ella. Por mucho que también
corra Simoni, el último vencedor del Giro, y , entre otros,
Pantani y Zülle, los nuestros saldrán como favoritos para
la victoria.
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